12/06/2018
Por: Guillermo Vega
Entre cables, paneles de aislamiento y un trajín interminable de obreros avanza el que será el futuro centro de Fraternidad-Muprespa en el madrileño (y exclusivo) Paseo de la Habana. A simple vista, esta puede parecer una obra más, aquellas que fueron tan frecuentes hasta hace diez años. Los responsables de la mutua (su director gerente, Carlos Aranda; y el subdirector general de Sistemas y Servicios, Pedro Serrera) se esfuerzan por recalcar que aspiran a que una vez que abra sus puertas este verano aspira a ser uno de los cuatro hospitales certificados LEED Platino en el mundo (Taiwán, Austin Texas, Estambul), una condecoración que concede la USGBCI (United States Green Building Council Institute).
“El ahorro económico en gasto energético en el Hospital Fraternidad-Muprespa es el 43% respecto un edificio de referencia similar”.
"La decisión de diseñar y construir un hospital bajo el estándar LEED, cumpliendo las exigentes reglas y guías que ello conlleva, tiene un efecto inmediato en el confort de los pacientes y sus familiares", explica Serrera. "LEED no se circunscribe solo a los parámetros de ahorro (energía, agua, residuos), sino que otorga una importancia crucial al confort y a la calidad ambiental que sentirán los ocupantes del edificio, ya sean pacientes y familiares como profesionales sanitarios".
Según los datos facilitados por Fraternidad-Muprespa, el hospital será capaz de ahorrar el 88% de la climatización en invierno; el 32% en iluminación interior y el 69% en iluminación exterior. Ahorra el 52% del gas natural consumido en la generación de ACS (agua caliente sanitaria). En conjunto, si se cumplen las previsiones de la compañía, conseguirá unos ahorros del 44% del coste en gas natural y electricidad.
Centro de la red
El ahorro se consigue fundamentalmente mediante el uso de energías renovables. Concretamente, el Hospital dispone de más de 600 m2 de paneles fotovoltaicos situados sobre la cubierta de instalaciones, que producirán 137.000 kWh anuales, el 8% del consumo anual de electricidad del centro.
El proyecto también incluye varios mecanismos de recuperación de aguas grises (lavabos, duchas, lavadoras y fregaderos) y pluviales, que son almacenadas, tratadas, y utilizadas en un circuito de aguas recicladas para los inodoros. De esta forma se consigue un reciclado de 8.000 litros de agua diaria, casi tres millones de litros de agua al año, que suponen el 57% de las necesidades de las descargas de los inodoros.
Tanto Carlos Aranda como Pedro Serrera destacaron en una visita realizada a las instalaciones que una de las características principales será su "concepción plenamente digital" (en cada rincón, de hecho, se puede encontrar una toma ethernet). Para ello, se ha concebido el viaje del paciente de forma que toda la información generada es estrictamente digital.
Elementos como la historia clínica electrónica, el sistema de identificación de pacientes mediante tecnología Bluetooth, la firma biométrica digital para conseguir un hospital sin papeles, el servicio de diagnóstico por la imagen totalmente digital, los quirófanos con un sistema de integración, todos ellos contribuyen a que la experiencia del cliente sea digital y compartida con él mismo. En el ámbito de la enfermería, los sistemas de gestión de planta, la dispensación automática de medicamentos, el acceso a la historia clínica mediante sistemas de movilidad, la integración con los equipos de monitorización, también contribuirán a simplificar el trabajo del personal de enfermería.
Estructura
Fuente: https://retina.elpais.com/retina/2018/06/05/innovacion/1528186864_690705.html