Construyendo las ciudades del futuro: la importancia de la gestión de datos para lograr servicios urbanos ultra tecnológicos
Las autoridades incrementan su apuesta por la tecnología como aliada para gestionar el día a día de sus ciudades y crear smart cities. La firma de soluciones analíticas en el sector público, DoubleTrade, destaca las oportunidades empresariales que acarrea el boom tecnológico en las urbes.
04/08/2022
El futuro de las ciudades pasa por ser inteligentes. O, en otros términos, por convertirse en smart cities. Este tipo de urbes, cuya gestión se fundamenta en el uso de las nuevas tecnologías para procesar todos los datos en tiempo real y acometer una gestión eficiente de recursos, se proyecta en los últimos años como el nuevo estándar de las ciudades y la posible respuesta a los altos niveles de contaminación. Aunque los expertos concuerdan en que queda mucho camino hasta lograr el objetivo, la innovación tecnológica y la inversión para adaptarse a este modelo de urbe supone una gran oportunidad empresarial.
Los datos que genera la actividad urbana día a día son infinitos y la gran mayoría corresponden a la ejecución de servicios urbanos. La recogida de la basura, la limpieza de calles o el propio alumbrado público son algunos de los servicios que, al acompañar su gestión con el desarrollo tecnológico, se puede alcanzar un importante ahorro de costes. Estas son solo algunas de las actividades que engloban los servicios urbanos, entre las que también podemos enumerar el suministro de agua, el transporte público o la organización del tráfico de la ciudad. Todos estos procesos pueden mejorarse por medio de la tecnología.
"Los ayuntamientos y demás gestores públicos son conscientes de que, pese la inversión inicial, una gestión eficiente de toda la información que genera la actividad urbana puede suponer una notable mejora socioeconómica para la ciudad", indica Xavier Piccinini, director general de DoubleTrade España, principal suministrador nacional de plataformas de datos y soluciones analíticas en el sector público.
"Para poder garantizar la creación de smart cities, es fundamental controlar los datos en tiempo real. A mayor velocidad y capacidad de gestionar todos esos datos, más rendimiento de todos los servicios urbanos y, por tanto, mayor comodidad para los ciudadanos", explica Piccinini. "Las ciudades inteligentes están en plena construcción y cada vez habrá más sectores y servicios que utilicen herramientas vinculadas a este concepto para mejorar su actividad", indica.
Oportunidades de negocio en la creación de smart cities
Un claro ejemplo de apuesta por estas urbes del futuro está en España, donde en 2014 se inició el Plan Nacional de Ciudades Inteligentes. Por medio de este proyecto, el Gobierno ha realizado diferentes inversiones por todo el territorio nacional para desarrollar las smart cities y situar a España en la vanguardia mundial del diseño de ciudades.
Según datos oficiales, el presupuesto destinado al plan es de 78 millones de euros repartidos con el objetivo de modernizar, especialmente, a los municipios de menos de 20.000 habitantes y territorios insulares; pero alcanza a cualquier región interesados en sumarse a la tendencia. En total, se estima que hay 28 proyectos realizados o por realizar con el modelo de ciudad inteligente como premisa.
"Para garantizar la operatividad de estas urbes es vital perfeccionar la gestión de unos servicios urbanos muy diversos, lo que refleja las oportunidades de negocio que existen en su proceso de desarrollo e implementación", destaca el director de DoubleTrade. Uno de los desafíos de estas smart cities, por ejemplo, está en la gestión de los residuos urbanos. Por medio de unos medidores instalados en los contenedores de basura, los gestores son capaces de saber en qué zona de producen más o menos residuos. De esta manera, se consiguen organizar los equipos de recogida y sus rutas.
Otro proyecto que ejemplifica el funcionamiento de las ciudades inteligentes, tal y como detalla Piccinini, es la gestión del agua. Un bien tan preciado como este requiere un control exhaustivo. Por ello, por medio de la información en tiempo real, hay lugares donde se conoce en vivo cuál es la calidad de agua y qué proceso debe seguir en cada momento para ser potable. Igualmente existen mecanismos que, por medio de unos parámetros determinados, es posible conocer cuál es el consumo en momentos determinados o si ha habido algún tipo de fuga en los conductos.
La empresa ACWA Robotics, especialista en trazar y evaluar las condiciones de la red de suministro de agua, es una muestra de ello. Gracias al desarrollo tecnológico y al rápido acceso a la información permiten informar a las gestoras de estas redes de cualquier defecto en un punto concreto. De esta manera, se consigue intervenir algún punto débil en la red y corregirlo eficientemente sin un análisis que suponga una gran carga de trabajo. El servicio de esta firma está en fase de validación y debería ser aprobado en los próximos meses.
También permiten a los gestores organizar el tráfico de la ciudad con los semáforos reduciendo así tanto el malestar de la gente como el impacto medioambiental; otro de los pilares de estas urbes inteligentes", explica Piccinini. Pero en realidad cualquier servicio urbano puede ser mejorado con la tecnología. Por ejemplo, el Ayuntamiento de la Palma sacó una licitación el pasado mes de febrero con un contrato superior a los 11 millones de euros para instalar y mantener los sistemas de regulación de movilidad de La Palma por medio del control normativo de este. Un proyecto que incluye, entre otras cosas, el mantenimiento de sistemas y la gestión del software. Otro ejemplo es Nueva York, que cuenta con unos sensores en los semáforos a través de los cuáles se organiza el tráfico, mejorando la eficacia de las vías, con la reducción de contaminación y huella de carbono que ello conlleva.
La luz es otro ejemplo muy relevante. El control del alumbrado público es fundamental. Más allá de la instalación de placas solares que reduzcan el impacto medioambiental, automatizar la intensidad de las luces de la calle y detallar las horas donde más falta hacen es clave para alcanzar la eficiencia.
Un mundo de datos por gestionar
La dimensión de las smart cities es compleja y estos ejemplos ponen en relieve un elemento básico para garantizar el funcionamiento de los servicios urbanos de las urbes: los datos. Las ciudades del futuro se proyectan íntimamente ligadas a la tecnología, lo que genera un sinfín de datos procedentes de los sistemas que operan en las calles. Por ello, es imprescindible diseñar estrategias para la gestión de esta información a través de herramientas como la monitorización de datos para controlar el estado de cada sistema de manera centralizada y poder anticiparse a problemas que puedan desestabilizar el funcionamiento.
Las autoridades, como demuestra el Plan Nacional, tienen la intención de invertir cada vez más en este proyecto y los fondos europeos Next Generation ayudarán a la transformación tecnológica de todas las regiones. Las ciudades inteligentes, más próximas a los objetivos de la agenda 2030, suponen un nicho de mercado clave para los próximos años.
"Hay miles de oportunidades de negocio y vendrán más. La inversión en eficiencia energética y en plataformas de servicios públicos crece a diario pero, para alcanzar estas urbes del futuro, es necesario hacer enormes cambios en el seno de las ciudades. Esto requiere un fuerte compromiso del Gobierno que se materializa en inversiones en formato de licitaciones y contratos públicos. Ahí es donde las empresas van a poder multiplicar su volumen de negocio aprovechando una buena estrategia de inteligencia comercial", subraya Xavier Piccinini, director del principal suministrador de soluciones analíticas para el sector público.
Datos del autor
Nombre |
Xavier Piccinini, director general de DoubleTrade España |
Empresa |
DoubleTrade España |